Las más oscuras mañas de Carlos Ahumada

La semana pasada, en su columna semanal para el diario deportivo Récord, el periodista Ignacio “Fantasma” Suárez reveló el supuesto amaño de un partido por el empresario Carlos Ahumada, en ese entonces dueño del Club León.
En su primera entrega, el “Fantasma” asegura que la vuelta de los cuartos de final del torneo Verano 2003 entre el León y los Lagartos de Tabasco fue amañada por Ahumada, quien en conjunto con Carlos Reinoso, les habría ofrecido 500 mil pesos a jugadores de Lagartos para que perdieran deliberadamente ese juego.
Dicha versión es sustentada por el periodista con testimonios de primera mano de Antonio Carlos Santos, entonces técnico del equipo tabasqueño, como de Camilo Romero, quien fungía en ese momento como capitán del equipo. Ambos aseguran en el reportaje que existieron acercamientos de Ahumada y Reinoso para ofrecer dinero a jugadores de Lagartos.
Ahora, el “Fantasma” publicó la segunda parte de este trabajo periodístico, y ahondó en detalles acerca de las muchas irregularidades que enturbiaron el paso del León aquella temporada.
En primera instancia es el mismo Antonio Carlos Santos quien confirma en un video sus declaraciones en la entrevista para el “Fantasma”, y revela que además del amaño, el equipo esmeralda utilizó trampas y situaciones extra cancha ´para afectar a Lagartos y asegurarse el pase a semifinales.
Carlos Santos dice que la directiva esmeralda pintó los vestidores visitantes del Nou Camp justo antes de la llegada de Lagartos, por lo que cuando estos ingresaron había un olor a solventes y pintura que resultaba insoportable. Además, la alfombra del vestidor habría sido inundada con aguas negras, lo que habría intensificado los malos olores. Y por último, se revela que el equipo visitante descubrió cámaras y micrófonos instalados para espiar sus movimientos.
Las acusaciones de espionaje no fueron destapadas recién ahora por el “Fatasma”, sino que en su momento, en 2004, los periodistas Rafael Ocampo y Alejandro Mayorga ya habían reportado el hecho con lujo de detalle en un trabajo especial publicado en Récord, y que se llevó a cabo con la ayuda de Alberto Olvera, exempleado de Ahumada y quien detalló la instalación del sistema de espionaje y de un clima artificial que el propio presidente les habría pedido expresamente mantener a 50 grados centígrados para ahogar a los rivales.
Con todo, esta no parece ser la revelación más impactante del trabajo del “Fantasma”, que después describe con la ayuda de un informante anónimo, que las cámaras y micrófonos no solo estaban instalados en el vestidor visitante, sino también en el espacio dedicado a los árbitros, y con lo que planeaban sobornar y extorsionar a los árbitros y a la Federación Mexicana de Futbol.
Según estas declaraciones, el plan de Ahumada sería muy parecido al que utilizó para exponer a René Bejarano en los videoescándalos políticos de 2004, pues pretendía ofrecerles un soborno, grabar a los silbantes aceptando maletines de dinero (o editar el video para que pareciera que lo aceptaban), y después utilizar el material para extorsionar a la Femexfut, en ese entonces liderada por Justino Compeán y Alberto de la Torre.
“Pasara lo que pasara, mi jefe (Ahumada) iba a tener el video del dinero con los árbitros. Imagínate el escenario, si un video así salía a la luz, el futbol mexicano se moría. La credibilidad quedaba reducida a cero. La afectación para las televisoras, para la Federación, sería inmensa. Te lo pongo así, si fueras Doña Tele ¿cuánto estarías dispuesto a pagar para evitar la filtración de ese video y el mega escándalo? ¿pagarías mucho dinero, pagarías con una franquicia de Primera?”, reveló el informante del “Fantasma”.
Sin embargo, el plan no llegó a concretarse debido a que en ese partido contra Lagartos se descubrieron las cámaras y se abortó esa estrategia.
Y la historia no termina aquí, pues Ignacio Suárez promete continuar con la final de ascenso frente al Irapuato, el secuestro del Sergio León Chávez, y la influencia de Ahumada y otros personajes turbios en esa serie.