Fidel Ambriz: La joya de la corona

Como suele suceder con las selecciones menores de México, la generación sub-20 del Tricolor tiene muchos argumentos como para ilusionar a los fanáticos nacionales con un futuro grandioso.
Y es que este grupo, dirigido por Luis Pérez, es un equipo multicultural con representación de hasta siete nacionalidades diferentes, y con chicos que ya luchan por un lugar en equipos competitivos de Europa, Estados Unidos y Sudamérica.
El más mediático de todos es sin lugar a dudas el talentoso centrocampista de 18 años del Arsenal inglés, Marcelo Flores, que se erige como la gran estrella del grupo, y que acapara las noticias y los posteos en redes sociales sobre la selección sub-20.
Marcelo cuenta con tres nacionalidades diferentes: mexicana, canadiense y británica, y ya ha sido tentado en varias ocasiones por Canadá para vestir la casaca de la hoja de maple, aunque todo indica que se decantará por México, donde ya suma un par de convocatorias a la sub-20.
Por su parte, otra de las figuras destacadas del grupo es el 'Loquito', Diego Abreu, delantero centro del Defensor Sporting de Uruguay e hijo del mítico Sebastián 'Loco' Abreu, y que cuenta también con 18 años cumplidos.
Diego, al igual que Marcelo, también cuenta con tres nacionalidades: mexicana, uruguaya e italiana, y aunque ya tiene un proceso con México, también ha sido tentado por Uruguay, por lo que el cuadro tricolor deberá asegurar su permanencia si no quiere perder a su prometedor goleador.
Además de ellos, destaca el caso del canterano del Puebla y actual delantero del Villarreal de España, Emiliano García, de nacionalidad mexicana y española, y que también es una de las grandes esperanzas a futuro del futbol nacional.
Y a todos ellos se les suman cinco chicos mexicoamericanos, liderados por Adrián González, hermano del canterano del Monterrey, Jonathan González, y actual jugador del LA Galaxy, donde comparte vestidor con otro seleccionado mexicano sub-20, Jonathan Pérez.
También en Los Ángeles, pero en el LAFC, juegan Antonio Leone y Christian Torres, mientras que el otro mexicamericano, Jonathan Gómez, juega en el Louisville CIty FC de la USL, la segunda división estadounidense.
Por si fuera poco, la última convocatoria de la selección mexicana sub-20 para una gira por España la completaron perlas del América, Chivas, Atlas, Puebla, Necaxa, Pachuca, Tijuana, Santos, Toluca y hasta el Querétaro, todos con un proceso destacado en sus equipos.
Pero de todos ellos, el que tiene el honor de liderar al grupo y llevar la cinta de capitán en su brazo no es la estrella del Arsenal inglés, ni el delantero del Villarreal español, ni tampoco el hijo del 'Loco' Abreu, sino que el encargado de echarse el equipo al hombro y representar a esta ilustre generación no es otro que el contención del Club León, Fidel Ambriz.
Y es que ya con un largo proceso en selecciones menores y habiéndose ganado la confianza de sus compañeros y su técnico, Fidel se erige como el capitán y una más de las figuras de este esperanzador equipo.
Con categoría y clase, Fidel esgrime su liderazgo no solo en el discurso, sino dentro del campo de juego. Tan solo en los dos encuentros de la gira española de este fin de semana, frente a Inglaterra y Francia, Fidel fue titular en los dos partidos, e incluso anotó el único gol mexicano en la derrota por 3-1 frente a los ingleses.
Es así como un chico leonés de apenas 18 años pero de carácter fuerte e indomable, se ha ganado el liderato de una generación de prometedoras figuras de las que seguramente seguiremos escuchando buenas noticias en los años venideros, y confirma que si se trata de un grupo de diamantes en bruto, Fidel es la joya de la corona.