Esta semana fue una horrible pesadilla
Si nos atenemos a los números, el panorama no luce trágico para el Club León: los verdes son el tercer mejor equipo del torneo con 15 puntos y se ubican a solo uno de Cruz Azul y América, que hoy comandan la Liga desde lo más alto de la tabla.
Sin embargo, la última semana de la Fiera puso en serios predicamentos la fe de la afición esmeralda, pues su equipo ya no se parece al que fue líder general hace unas jornadas y mucho menos al que hace un año consiguió la histórica racha de 12 victorias consecutivas.
La humillante eliminación en Concachampions amplificó las críticas en el entorno esmeralda, incrementó la exigencia al plantel y puso contra la pared a Nacho Ambriz. El 3-0 provocó incluso que un drástico sector de la afición pidiera la renuncia inmediata del técnico esmeralda.
Al Club León no le quedó más remedio que usar su cuenta de Twitter para ofrecer disculpas a la afición y comprometerse a ir con todo por la Liga. El domingo había que visitar a las Chivas.
Pero el compromiso realizado en 240 caracteres no fue respaldado sobre el terreno de juego este domingo. La Fiera deambuló sobre el estadio Akron y sufrió su tercer derrota del torneo al caer 2-0 ante las Chivas.
En Guadalajara volvimos a ver al León gris y desangelado que a mitad de semana fue liquidado en Concachampions: ese que juega sin capacidad de reacción ni asociación, el que otra vez presenta un plantel corto y sin soluciones desde la banca.
Ese León al que no despertó ni el beso traidor de su último goleador. El que no se parece al que hace unas semanas ilusionaba con ganar todo lo que se le pusiera enfrente.
Unos lo ven como un simple bache, otros hablan de crisis y exigen drásticas soluciones. Lo cierto es que en solo una semana León perdió la esencia y puso en predicamentos la fe de su afición.
Por lo pronto, Jesús Martínez manifestó su respaldo al proyecto, apeló a lo construido por Ambriz desde que tomó el timón y lo definió como "un mal momento, nada más."
Si nos atenemos a los números, León se mantiene con autoridad en puestos de liguilla, pero si apelamos a lo vivido durante la última semana de febrero y el primer día de marzo, la octava estrella todavía parece estar muy lejos del escudo.
Por delante viene una semana que puede ser crucial para la Fiera, pues en teoría recuperará a Yairo Moreno y a Nico Sosa para enfrentar a los Bravos de Juárez.
El próximo domingo en la frontera, Ambriz y sus muchachos tienen la oportunidad perfecta para regresar la fe a su afición y demostrar que los últimos días solo fueron una terrible pesadilla, que nunca más se volverá a repetir.
