Jesús y Bava están poniendo la vara muy alta en León
Después de tantos años y temporadas, pasaron varios técnicos por la plantilla y la petición por fin fue escuchada y realizada por Jesús Martínez: habrá una limpia muy grande de jugadores en el Club León.
Tuvo que llegar Jorge Bava para que esto fuera posible. Y la verdad es que nadie sabe el por qué, pues sus argumentos futbolísticos no le daban para esto, pues fracasó en su primer torneo al mando y dejó mucho que desear.
Ignacio Ambriz fue campeón, hizo una de las mejores plantillas de la historia de la institución y logró el récord de las 12 victorias lo pidió y no se le cumplió. Lo mismo con Ariel Holan, que en su primer torneo en el equipo llegó a una Final y ganó la Leagues Cup.
Sus problemas en la interna con Luis ‘Chapo’ Montes y Rodolfo Cota, la presión mediática y el qué no le armaran un plantel competitivo fueron suficientes para que el entrenador argentino presentara su renuncia antes de que terminara el torneo.
Llegó Renato Paiva al banquillo del Club León y solamente duró un semestre, pues el problema de sus dos antecesores siguió, y la directiva comandada por Jesús Martínez no mostraba interés en que esto cambiara verdaderamente.
“Algunos jugadores no estaban dispuestos a poner en práctica nuestras ideas”, comentó el estratega portugués tras su salida del conjunto esmeralda, esa misma que se dio entre lágrimas un lunes por la mañana.
Llegaría Nicolás Larcamón a tomar el equipo y en su primer torneo logró lo que parecía imposible: ganó el primer título en la historia de la institución, puso el trofeo de la Concachampions en las vitrinas y seis meses después jugaría el Mundial de Clubes.
Pero en el intermedio algo se rompió entre el argentino y la directiva. Todos pensamos que le harían un equipo competitivo para el torneo internacional, pero fue todo lo contrario y el resultado fue el peor: quedaron eliminados en su primer partido.
La peor participación de un equipo de la Liga MX en el Mundial de Clubes. Pesó mucho en la institución, tanto así que ese mismo día despidieron a Nicolás Larcamón y los sustituyeron con Jorge Bava, con quien habían hablado meses atrás.
Sí, casi al mismo tiempo en que Larcamón levantaba el trofeo de la Concachampions. Las malas finanzas, que derivó en no traer a refuerzos de calidad, la seriedad en el proyecto, un plantel sin hambre y el actuar de la directiva desgastaron esta relación.
Hoy a Jorge Bava le darán lo que a otros directores técnicos no pudieron o quisieron. La salida de jugadores que ya no dan más o que son conflictivos. Ahora el técnico uruguayo deberá responder con resultados con la confianza de que no saldrá, pues él dirigirá en el Mundial de 2025…