Cielo de un solo color
A nuestra historia le pertenecen capítulos históricos. Tardes y noches de alegría desbordante. De amaneceres con una nueva estrella en el escudo y un trofeo más en la vitrina.
De travesías complicadas: dos para ser exactas; una del tamaño de una década. De matadores, arqueros y guerreros con corazón de León.
Nos pertenece una afición fiel y aguantadora, exigente y popular. Esa gente que pinta calles, gradas y el cielo de un solo color.
Sin embargo, existe un páramo que no nos pertenece aún, difícil de conquistar. El sueño lejano que durante setenta y nueve años de escribir esta historia hoy nos dice que estamos a un gol de enfrentar a capa y espada esa ilusión que nos vibra en el pecho y no nos deja casi respirar.
Porque la renovación de las esperanzas siempre llega cuando el cronómetro marca el cero, y un silbato da inicio a la carrera contra la adversidad.
Y para ello, los uruguayos de No Te Va A Gustar, encontraron las palabras exactas: "hay algo que sigue vivo, nos renueva la ilusión, y en el último suspiro".